Los algoritmos A* (se lee A estrella) son algoritmos voraces (que tienden a consumir muchos recursos y principalmente memoria) pero que admiten una sencilla implementación y son aplicables a multitud de situaciones. Además, permiten optimizarlos con estrategias específicas para cada problema a resolver y siempre que exista, encuentran la solución óptima (a costa, en el peor de los casos, de revisar todas las posibilidades).
Uno de los problemas para los que se utiliza es para obtener el camino óptimo que se debe seguir en un mapa. Esta es una sencilla implementación.